La actual situación de confinamiento decretada por la crisis del COVID -19, nos está llevando a empresas, particulares y administraciones públicas a un proceso de adaptación tecnológica que abre un marco de posibilidades que hasta hace solo unos meses contemplábamos con cierto escepticismo.

En este sentido, la función pública que cumplen los Notarios, especialmente celosos con los procesos legales de los que deben dar fe pública, también ha dado un paso adelante mediante la adopción de un acuerdo en el seno del Consejo General del Notariado, que permitirá a los notarios la utilización de la firma electrónica – que está homologada por el Ministerio de Economía, a través de la SEAD (Secretaría de Estado de Avance Digital) y cualificada de acuerdo al Reglamento (UE) 919/2014 del Parlamento Europeo y el Consejo Europeo- y del uso de la videoconferencia en varios asuntos capitales.

Desde luego, hay cuestiones de importancia esencial en estas semanas, en las que la relación con el notario de confianza será posible, y hasta razonable, por medio de cualquier ordenador o dispositivo electrónico. A modo de ejemplo, la petición de copias simples de la hipoteca o de las compraventas de inmuebles, de forma gratuita, para tener acceso a la moratoria hipotecaria. En otros casos, y en lo que de verdad tiene importancia, puesto que, sin duda, supone un paso adelante que ha llegado, entendemos, para quedarse, destacamos varias cuestiones que forman parte de deben entenderse incluidos en el acuerdo del Consejo General del Notariado:

  • La autorización de pólizas de crédito mediante firma electrónica y a través de videoconferencia, que sirve hoy al objetivo de cumplimiento de la limitación del derecho de circulación, pero que debería suponer una forma habitual de actuación una vez atenuada la crisis sanitaria.
  • La autorización por videoconferencia de testamentos.
  • El otorgamiento y revocación de poderes especiales.
  • Determinados actos societarios.

No nos cabe duda de que la emergencia ha hecho acelerar procesos de actualización de sectores en nuevas tecnologías que tendrán un impacto positivo en el dinamismo y la agilización de trámites al final de la crisis.


Javier Val. Abogado
A.n.D. Abogados